Descripción
Con un poquito de musgo, unos cuantos palitroques y tres puños de barro, Lobo construyó su nido en la octava rama de su castaño. Y una vez instalado en su nuevo hogar…¡¡¿Se dispuso a poner un huevo?!!
Estamos ante una tierna historia de amor.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.