Hoy, 20 de junio, se celebra el día Mundial del Refugiado #DíaMundialdelRefugiado. , comenzó a celebrarse en el año 2001, en conmemoración del 50 aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951.Antes de su designación oficial por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, este día mundial se conocía anteriormente como el Día de los Refugiados de África.
Desgraciadamente, no podemos decir que hayamos avanzado en esta situación, siguen los conflictos sociales y políticos. Siguen las guerras, siguen muriendo personas y las que no fallecen tienen que escapar con lo puesto a otros países, dejarlo todo para volver a empezar, su equipaje una vida rota.
El tema para 2022 se centra en una idea fundamental y es que todas las personas del mundo tienen derecho a buscar protección, sin importar quiénes sean, de donde vengan ni cuándo hayan tenido que huir.
El lema es el siguiente: «Quien sea. Donde sea. Cuando sea. Toda persona tiene derecho a buscar protección».*
*Fuente: www.diainternacionalde.com
En La Crisálida siempre decimos que la literatura es una herramienta para acompañar en el proceso educativo ya que es una oportunidad para experimentar la existencia del otro. Les ayudan a poner palabras para construir una realidad ( parece que de lo que no se habla no existe). El álbum ilustrado es una forma de sensibilizar ante temas sociales y provocar la reflexión y el diálogo.
Dentro de nuestra sección de Desigualdad Social , podéis encontrar el bloque Guerras, donde os invito a navegar y perderos por títulos relacionados con los conflictos sociales.
Hoy quiero hacer especial mención a un libro del cual todavía no os había hablado.
Escrito e ilustrado por Paco Ortega.
Editado por Bookolia.
Recomendado a partir de 4 años
¿ Qué nos cuenta?
Alika es un niña que se duerme en los brazos de su mamá, y como muchos niños y niñas del mundo esos instantes antes de quedarse dormidos son propicios para las confesiones y las ensoñaciones. La mamá de Alika le promete durante esos momentos que al despertar podrá regalarle lo que tanto lleva esperando.
¿Qué será eso que una niña como Alika espera?
Alika cierra sus ojos soñando en las flores de la primavera, el agua limpia y cristalina del arroyo que tanto le quita la sed, en el suave pelo de su ovejita que huyó antes de «la terrible tormenta», en sus amigos, en la nana que su abuela le cantaba. Son tantas las cosas que Alika añora, que no puede adivinar que será.
Alika se duerme feliz, su mamá podrá darle lo que tanto tiempo llevan esperando.
¿ Qué será?
¿Qué nos aporta el texto?
Paco Ortega ha creado un texto que nos invita a ponernos en el lugar de Alika, una niña que ha tenido que huir con su madre, su vida corría peligro en el poblado donde vivían, Alika lo llama «la terrible tormenta» en el fondo todos sabemos que esa tormenta es la guerra. En su huida por salvar la vida ha dejado sus raíces, su casa, sus costumbres, su familia, amigos, paisaje y animales. Su madre y ella tendrán que empezar una nueva vida, nueva vivienda, nuevos paisajes, nuevas personas, nuevas costumbres y quien sabe, quizás también nuevo idioma. Así es ser refugiado.
Las ilustraciones de Paco nos trasladan a cada uno de los lugares que Alika tanto añora. Comenzando por la noche la noche, donde predomina los grises y negros, destacado las figuras de Alika en brazos de su madre, alumbradas por una gran luna blanca y las estrellas. Pasando a la luz, colores brillantes y alegres como los pensamientos y deseos de Alika, gracias a ellos conocemos su anterior vida. Ilustraciones a doble página sin texto, que nos hacen de oasis en mitad del desierto, para continuar con el viaje. Un final que hace regresar al escenario principal de la noche Paco nos muestra una noche avanzada y nos desvela en lugar desde donde Alika nos desvela sus sueños, esa barca que les llevará hacia la nueva vida.
Sin duda un álbum ilustrado que nos propone una reflexión y profundizar en otras realidades, no tan lejanas. Un texto que seguirá latente en nuestra mente y alma una vez leído, hay muchas preguntas que responder, sabemos que Alika y su mamá empezarán otra vida, pero… ¿Qué vida les espera? ¿Nos hemos planteado las dificultades por las que pasan los refugiados? solo sé que les queda un largo camino que recorrer.