El 15 de mayo se celebra el día internacional de la familia. Quiero abrir esta semana con una recomendación que estoy segura que no os va a dejar indiferente.
“Un poema para mis abuelos” de Sara Búho, ilustrado por María Girón. Editado por Baobab.
Estamos ante una obra que te hace retroceder a la infancia, es una declaración de amor de nietos a abuelos.
Un libro en palabras de la autora, que “para que tenga sentido es necesario un niño o una niña, y un abuelo o una abuela al que quieran mucho, aunque también pueden participar los adultos que no han olvidado cómo se sienten los niños…”
Tengo que decir que, desde la portada, pasando por las guardas, y las primeras palabras introductorias del libro ya te atrapa, te envuelve y te hace retroceder a esos instantes en los que estar con la abuela o el abuelo te hacían sentir la persona más especial del mundo.
Los abuelos son vida, son cuna, son escudo, son canción, son alegría, son sabiduría, son silencio .
Un poema que da gracias a la vida, una existencia que reconocemos gracias a ellos, a nuestros abuelos. Nos hace encontrarnos con su experiencia, su paciencia y su saber estar, pero también nos hace conscientes que un día seremos nosotros los que cuidaremos y arrullaremos.
Yo haciendo caso a la autora, he cerrado los ojos y me he dejado llevar a un viaje al que volvería sin dudarlo una y otra vez.
He podido recordar el sonido de sus voces, como mi abuela canturreaba y mi abuelo silbaba sus “jotas” favoritas o los piropos de mi abuelo a mi abuela, “negrilla” de decía. Los olores al entrar en su casa, rosquillas, sopas…y quién sabe qué más.
Las ilustraciones de María Girón me han llevado de viaje, me he permitido hacer una visita al patio del pueblo, un pueblito de Castilla, donde el calor aprieta desde que sale el sol. Recuerdo el tacto y el olor de las sábanas recién lavadas colgadas en el patio y como me metía entre ellas para refrescarme. Son tantos y tantos los recuerdos, que no quiero que se acabe el viaje.
Doy gracias a Sara Búho y a María Girón por esta obra, y porque de verdad, este poema a sido una excusa para estar de nuevo con ellos, con los abuelos.
Un libro maravilloso que podéis encontrar aquí, en La Crisálida.